lunes, 23 de junio de 2014

Envases que se disuelven en el agua

Es una idea perfecta, ya que no genera residuos, no ocupa lugar, ni te da trabajo de reciclaje, si encima está hecha de algo alimenticio para los peces como alguna alga, tipo agar agar, ¿qué más se podría pedir?

En un momento donde los que tenemos conciencia medioambiental, reciclamos concienzudamente, y además tenemos una cocina enana, lo de reciclar es toda una tortura, generamos y generamos toneladas de residuos semanalmente. Este envase para un cepillo de dientes que se disuelve en el agua, es una idea genial y brillante, ecológica y práctica.

Además qué puede haber más ecológico que un envase soluble, siempre y cuando esté hecho de alguna materia que no contamine el agua. Es una idea perfecta, ya que no genera residuos, no ocupa lugar, ni te da trabajo de reciclaje, si encima está hecha de algo alimenticio para los peces como alguna alga, tipo agar agar, ¿qué más se podría pedir?

Esta brillante idea ha surgido en la escuela UQAM, concretamente del alumno Simon Laliberté de manos del profesor Sylvain Allard, el cual quedó ganador en el evento internacional de diseño de envases organizado por Strate Collège en París, no es de extrañar.

El evento reúne a las mejores escuelas de diseño de packaging de Europa, como la Universidad de Artes Aplicadas de Hannover en Alemania, la Universidad CEU Cardenal Herrera en España, la Universidad de Artes Aplicadas de Lahti en Finlandia y el Politécnico de Milán en Italia.

Simon Laliberté trabajó en la idea de un envase de cepillo de dientes soluble, con un diseño mínimo, atractivo, interactivo y eficaz. El usuario sólo tiene que pasar el paquete por agua y se desintegra instantáneamente.

Me encantaría que esta iniciativa no se quedara en un simple proyecto de escuela y que se desarrollara para una aplicación real, que en un futuro a corto plazo se hiciera realidad poder tirar todos los envases al fregadero, mientras lavas los platos, y cuando terminas, te has deshecho de todos tus residuos. Ya para pedir que todo el mundo lavara con jabón ecológico, y así no contamináramos el agua, sino la enriqueciéramos.


Packaging soluble./ @Maria Victrix


El producto que más se asemeja a lo que acabo de comentar es el genial packaging de The stop the water while using me! con el que ayudarás a cuidar el medio ambiente, con un packaging biodegradable y hermoso que te recuerda que cierres el grifo del agua mientras te enjabonas y un producto natural. Podrían ponerse de acuerdo Sylvain Allard para hacer sus packagings solubles al agua!

Fuente: http://tallersmariavictrix.blogspot.com.es/

Estudiantes crean una teja que absorbe el smog


La teja actúa mediante un recubrimiento de dióxido de titanio que descompone el óxido de nitrógeno en compuestos menos dañinos.




La contaminación del aire afecta nuestra salud mucho más de los que imaginamos, incluso más de lo que podemos notar y es un problema latente en casi todas las grandes ciudades del mundo. Gracias a esto hay muchas personas que se han querido aprovechar de la pobre calidad del aire en ciertas ciudades de Asia vendiendo "aire fresco".

No se ven muchos esfuerzos por parte de las autoridades para poner fin a la contaminación del aire ya que la economía depende en cierta medida de las grandes industrias que aportan gran parte de las emisiones contaminantes en el aire. Nosotros como ciudadanos también aportamos una parte de contaminantes y al menos esa podemos contrarrestarla con algunas acciones.

Utilizar medios de transporte alternos y reducir nuestros desechos bien pueden ayudar pero hay gente que va más allá de eso. Un grupo de estudiantes de la Universidad de California ideó una manera de protegernos del smog: una teja que ayuda a eliminar los tóxicos gases del óxido de nitrógeno que producen los automóviles y centrales eléctricas.

Esta teja puede ayudar a reducir la contaminación del aire de una forma poco costosa. La teja tiene un recubrimiento de dióxido de titanio que descompone al óxido de nitrógeno en compuestos menos dañinos al entrar en contacto.

La simple cobertura de dióxido de titanio, ayudaría a eliminar cerca del 88 al 97% de óxido de nitrógeno de la atmósfera a un precio increíble, por $5.00 ($65 pesos) dólares se podría cubrir un techo entero que absorbería las emisiones de un auto durante más de 17.000 kilómetros en un año.

El increíble invento de estos estudiantes ganó un premio en el concurso de diseño de La Agencia de Protección Ambiental y con razón, pues es una idea que parece viable al menos en la mayor parte del mundo. Este es también el tipo de participación ciudadana que necesitamos para hacer un mejor lugar para vivir.


Fuente: http://www.betazeta.com/
REDACCIÓN

redaccion@ambientum.com 

Por orden judicial realizan el mayor diagnóstico de un humedal chileno


La empresa Arauco financia estudio de $684 millones para evaluar la calidad del agua, sedimentos, flora y fauna en el Santuario Carlos Anwandter. Fuente: El Mercurio 23 de junio 2014.

Treinta y cinco investigadores de las universidades Austral, de Concepción y Santo Tomás trabajan desde abril en el mayor diagnóstico ambiental que se haya realizado en un humedal chileno. En este caso, el del río Cruces, en el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter, en Valdivia, como parte de las acciones reparatorias que ordenó el fallo que el año pasado condenó a la empresa Arauco por los daños que causó desde 2004 con la puesta en marcha de su planta de celulosa en San José de la Mariquina.

Dicho episodio, cuya imagen más recordada es la progresiva muerte de cisnes de cuello negro y su migración de la zona, impactó negativamente no solo una de las más bellas postales turísticas de la capital de la Región de Los Ríos, sino además en un rico ecosistema.

El estudio cuesta $684 millones y es financiado por la propia empresa, como parte de la sanción judicial. El fallo también impuso el pago de una multa de $2.600 millones y otros cuatro puntos reparatorios: construir un humedal artificial con carácter de centinela, realizar un programa de monitoreo ambiental constante por un período no menor a cinco años, crear un centro de investigación de humedales y llevar a cabo programas de desarrollo comunitario.

Agua y sedimentos
La investigación multidisciplinaria es coordinada por el doctor Eduardo Jaramillo, con el apoyo en terreno de los biólogos marinos Jonathan Vergara y Pedro Rubilar.

Jaramillo explica que los estudios se han enfocado en medir la calidad del agua y los sedimentos en el lecho central del río Cruces, además de los sectores de Ciruelos, Rucaco, Santa Clara y Punucapa y la confluencia del río Cau Cau. También han instalado estaciones de monitoreo en los ríos Pichoy, Cayumapu, Calle Calle, Valdivia y Angachilla.

La toma de muestras se aplicará no solo en los humedales que forman el santuario del río Cruces, sino también en sus ríos tributarios (Cudico, Cayumapu, Nanihue, Tambillo y Pichoy) y sus riberas. Allí los estudios incluirán análisis de calidad de agua, sedimentos, condiciones hidrográficas, estado actual de flora y fauna, suelo que rodea al humedal y su evolución con el paso de los años, lo cual se verificará a través de imágenes satelitales.

Otro aspecto de este trabajo es que se entrevistará a los habitantes de localidades aledañas al santuario Carlos Anwandter, para tomar registro del conocimiento ecológico local.

El primer avance de esta investigación se conocerá en agosto.
30% de avance registra el muestreo en terreno.
5 mil hectáreas contempla el área de estudio que concluirá en marzo de 2015.

lunes, 16 de junio de 2014

Ketocui: Conaf capta imágenes de nueva especie de roedor en altiplano chileno




Este pequeño y tierno roedor nunca había sido reportada en la región y al parecer en Chile, por tanto puede considerarse un hallazgo científico significativo y un tema más de análisis para los expertos de la región y el país. Dínamo, 11 de junio de 2014.

El guardaparque de Corporación Nacional Forestal (Conaf) Roberto Tancara Querquezana fue el primero en fotografiar y dar a conocer las imágenes de un ratoncito, que no había visto antes en sus recorridos y patrullajes por el sendero del Lago Chungará. El hecho ocurrió el 5 de enero y las fotos subidas al Facebook de Conaf, un espacio que se ha ganado cientos de seguidores, en atención precisamente al material fotográfico que comparte, respecto de la biodiversidad y el quehacer institucional en materia de conservación y educación ambiental.

Posteriormente, las propias cámaras-trampa de Conaf captaron también la nueva especie, y entonces vino el segundo aporte en la línea de esta historia, de parte del especialista peruano Constantino Aucca, quien ha dedicado su vida al tema de la conservación y junto su colega, Sergio Solari, corroboró que se trata de la especie Abrothrix jelskii, que habita en el vecino país, y cuyo nombre común es ketocui.

La gracia del asunto es que este roedor nunca había sido reportada en la región y al parecer en Chile, por tanto puede considerarse un hallazgo científico significativo y un tema más de análisis para los expertos de la región y el país. Pero como en el campo de la ciencia siempre hay acciones a la par, también se suman a este hallazgo las fotos del profesional Andrés Puiggros, quien junto a sus colegas Oscar Fuentes Mardones y Guillermo Feurhake, publicaron en el sitio fotonaturaleza.cl, imágenes captadas a comienzos de mes, en un recorrido por la zona.

En términos bibliográficos, la especie aparece mencionada en la literatura especializada, en el libro Mamíferos de Chile, del investigador en fauna silvestre, Agustín Iriarte. Incluso, al interior de la Conaf regional se señaló que Iriarte al saber de las fotos del guardaparque, quiso venir a la región, por la importancia del hallazgo.

El ketocui está reportado para Bolivia y el sur peruano, y según indicó por su parte el director de Conaf Región de Arica y Parinacota, Guillermo Cisternas, “a pesar de ser un animal con presencia en altiplano y Puna en los países vecinos, nunca se había hecho un registro en Chile, por lo que este hallazgo es de suma importancia para incrementar los registros de la biodiversidad en Chile”, detalló.


El directivo agregó que “es de relevancia destacar el trabajo que hacen nuestros guardaparques en terreno haciendo una labor sacrificada que contribuye al cuidado de nuestra biodiversidad y también el aporte para la ciencia. En este sentido resaltamos el hecho de que Conaf está constantemente incorporando tecnología para hacer nuestro trabajo más eficiente y por consecuencia más útil a la sociedad”.

Reserva Costera Valdiviana es el área de conservación más grande de Chile

50 mil hectáreas son protegidas y preservadas a perpetuidad, aunque cambien de dueño, establece la iniciativa de The Nature Conservancy. Fuente: La Segunda 10 de junio 2014.


Bosques de alerces, pudúes y poblaciones de zorros de Darwin. Esas son algunas de las especies que habitan en 50 mil hectáreas ubicadas entre las comunas de Corral y La Unión, en la Región de Los Ríos, que componen la Reserva Costera Valdiviana (RCV).

La misma que desde hace algunas semanas, y gracias a la gestión de la ONG The Nature Conservancy (TNC), se transformó en la “servidumbre de conservación” más grande de Chile. Un área que tras la firma de una escritura pública está protegida y deberá ser preservada a perpetuidad, aunque cambie de dueño.

Según la gerente de conservación de TNC, Maryann Ramírez, luego de haber adquirido hace más de 10 años el terreno, que en el pasado perteneció a dos empresas forestales, encontraron una herramienta legal que asegurara su protección.

“Se eligió este lugar porque es una zona de alto valor de conservación, con un bosque templado de importancia mundial y un ecosistema endémico, pero muy amenazado por la presencia de la industria forestal y con muchos cambios en el uso del suelo”, explicó.

El trabajo en terreno a lo largo de una década, sin embargo, ha dado sus frutos. Muestra de ello es que con la instalación de cámaras trampa lograron establecer la presencia de especies que no existían en esa zona, como el zorro de Darwin, que está en peligro de extinción.
O certificar la edad de alerces milenarios. “Tenemos uno de 3.600 años”, cuenta orgullosa la ejecutiva, quien está consciente de que lo difícil viene ahora, pues si bien lograron transformar las 50 mil hectáreas en una “servidumbre de conservación”, asumieron una serie de compromisos que deberán cumplir al pie de la letra.

“Se hizo una zonificación donde hay especies de bosque nativo y alerces que no se podrán tocar jamás. También se estableció una ruta con kilómetros y metros cuadrados restringidos donde podría haber senderos”, comentó Ramírez.

Además, TNC limitó los espacios para la construcción. “Hay zonas donde están las cabañas de los trabajadores, pero se limitó la infraestructura y no se puede levantar, por ejemplo, una casa”, dice la gerente, quien agrega que obviamente en la RCV no se puede cazar, ni tampoco poner trampas. Que todos esos compromisos se cumplan será fiscalizado por la Fundación FORECOS (Ver recuadro).

Para asegurar la conservación la ONG firmó un acuerdo con BHP Billiton, que protegerá las 50 mil hectáreas removiendo eucaliptos y plantando más de 2,5 millones de árboles autóctonos. En total, invertirán US$20,4 millones en este proyecto que generará bonos de carbono, preservará el bosque nativo y evitará la degradación.

Evaluarán presencia de amenazas Habrá monitoreo constante


Para que la servidumbre se cumpla debe haber un garante, figura conocida como Land trust, que en este caso es la Fundación FORECOS. Su vicepresidente, Christian Little, contó que hay un plan de monitoreo de 3 etapas. “Se harán controles anuales, bianuales y cada 5 años para evaluar cambios en las áreas permanentes, las de acceso más difícil y el nivel de amenazas”, explicó. En este sentido, dijo que la principal es el hombre, que con sus actividades puede provocar, por ejemplo, incendios forestales. Además, evaluarán la existencia de especies invasoras, como el ulex (un género de arbustos) y la presencia de ganado, puede entrar a la reserva y que la degrada.

Los desechos de plástico en el océano forman un nuevo tipo de roca


Roca./ @veoverde

REDACCIÓN


La basura plástica que arrojamos al mar se derrite y se mezcla con desechos naturales del océano para formar este nuevo tipo de roca.

Todo lo que hagamos dejará una huella en el planeta tal como las demás eras antes de la nuestra han quedado grabadas en el suelo de la Tierra. Nuestro paso por este mundo estará marcado por una serie de nuevos componentes que resultan de nuestra actividad.
Los diferentes tipos de rocas y combustibles fósiles se formaron con el tiempo y nos dejan ver cuáles eran las condiciones de vida en ese entonces. Cuando los seres del futuro estudien el suelo que dejamos, ¿qué encontrarán? ¿Qué delatará nuestra existencia?
En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, científicos Canadienses anunciaron un descubrimiento que me dejó sin palabras. Se ha descubierto un nuevo tipo de roca que se forma al derretirse la basura plástica que arrojamos al océano y mezclarse con restos que naturalmente existen en él.
Plastiaglomerado
Los investigadores llamaron a este material "plastiaglomerado" (plastiglomerate) que se forma por lo general en las playas que son ricas en sedimentos, fragmentos de lava y restos de materia orgánica que es arrastrada a la orilla por el oleaje. Cuando llega a la línea de la costa se mezcla con este plástico que nosotros hicimos favor de arrojar para dar paso a esta nueva roca que dejará una huella geológica de nuestra inconsciencia.
Esta nueva roca se descubrió en la playa de la isla Kamilo en Hawái, una de las costas más sucias del mundo. La roca se presenta de dos maneras: "in situ" que se encuentran incrustadas en formaciones rocosas más grandes y las fragmentarias, que son rocas sueltas.
Las rocas más raras son las "in situ" ya que en ellas el plástico se funde incorporándose a una roca más grande mientras que las otras se forman por restos de corales, basalto, arena, madera y plástico derretido. Este nuevo material es mucho más denso que el plástico por sí solo, esto significa que puede quedarse enterrado y conservarse en el registro rocoso más fácilmente que elplástico convencional.
Al principio se creyó que el "plastiaglomerado" se formó porque la lava derretía el plástico creando este material, pero la lava ha estado presente desde antes que el plástico se inventara. Esto sólo comenzó a ocurrir cuando el humano intervino el océano con toneladas de basura plástica. Las rocas se empezaron a formar porque los locales de la isla Kamilo quemaban basura plástica en las orillas y es probable que esto se dé en muchas otras.
Si todo lo que hagamos en el mundo dejará rastro, ¿qué tipo de cosas queremos que se vean de nosotros?

sábado, 7 de junio de 2014

El huemul se encuentra en peligro de extinción, hay menos de 2 mil ejemplares vivos

La población de uno de los símbolos de nuestro escudo nacional está en declive, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. El Dínamo, 31 de mayo de 2014.
Los escudos nacionales de los países de América Latina reflejan toda la riqueza natural de una región considerada una “superpotencia de la biodiversidad”, pero algunos de sus símbolos corren el riesgo de existir solo en la heráldica.

Fuente: http://www.conservacionybiodiversidad.cl/ 



El caso más grave es el del huemul (Hippocamelus bisulcus), un tipo de ciervo del extremo sur del continente americano que es uno de los símbolos incluidos en el escudo nacional de Chile.

El huemul está, desde hace años, en la “lista roja” de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y en la categoría de especie “en peligro”, la peor después de las de “extinción”, “extinción en la vida salvaje” (animales que solo están en zoológicos u otras instituciones) y “gravemente en peligro”.

En su ficha de la lista de UICN de 2014 se señala que solo quedan entre 1.500 y 2.000 ejemplares de estos asustadizos y robustos cérvidos en Chile y en Argentina, y “la población está en declive”.

Un escalón más abajo que el huemul está un animal que no forma parte de ningún escudo nacional, pero cuya imagen se va a ver por todos lados este año, sobre todo del 12 de junio al 13 de julio, aunque no tanto en su hábitat natural, la “catinga”.

Se trata del tatu-bola, un pequeño armadillo endémico de Brasil que ha servido de inspiración para el diseño de “Fuleco”, la mascota del Mundial de Fútbol 2014.

El Tolypeutes tricinctus, como lo llama la ciencia, está también en la “lista roja” de 2014 como especie “vulnerable” y con una población en declive, aunque no cuantificada por UICN.

Lo paradójico del caso es que los causantes de que los tatu-bola y el huemul estén amenazados pertenecen a la misma especie que los que eligen sus imágenes para promover un gran encuentro deportivo o representar a la patria.

El tatu-bola, del que llegó a creerse que estaba extinguido hasta que fue redescubierto a principios de los años 90, está amenazado por la dura presión de los cazadores y la pérdida de su hábitat por el avance de la agricultura, dice la organización de defensa de la naturaleza con sede en Gland (Suiza) y más de 1.200 organizaciones de todo el mundo entre sus miembros.

Lo mismo le ocurre al huemul, un animal protegido, cuyos enemigos son “el hombre, el puma, el zorro y los perros domésticos”, pero también la ganadería y la deforestación, dice UICN.

El otro animal que aparece en el escudo chileno, el cóndor andino (Vultur gryphus), presente también en los de Bolivia, Ecuador y Colombia, no corre tanto peligro y hay al menos 10.000 ejemplares actualmente repartidos en un área muy grande, pues abarca desde Argentina y Chile, en el sur, hasta Venezuela y Colombia, en el norte de Sudamérica. La IUCN lo considera, no obstante, “próximo a estar amenazado”.

El vistoso quetzal centroamericano (Pharomachrus mocinno), que ocupa un lugar destacado en el escudo nacional de Guatemala, está en el mismo apartado que el cóndor dentro de la “lista roja”.

Según la organización de defensa de la naturaleza, este ave de brillante plumaje que tiene su hábitat en los países centroamericanos y México está experimentando un descenso de población moderadamente rápido, debido a la desforestación y hoy hay como mucho 50.000 ejemplares.

La vicuña (Vicugna vicugna), uno de los símbolos nacionales de Perú, que tiene su imagen en el escudo, no es motivo de preocupación para UICN, que señala que su población está en aumento, lo cual es lógico dado el valor de su lana.


Su prima la alpaca (Vicugna pacos), que campa en el escudo de Bolivia, tampoco tiene problemas de supervivencia y ni siquiera aparece en la lista roja, al igual que los dos animales presentes en el escudo de Uruguay, el buey y el caballo.