viernes, 26 de agosto de 2016

Japan scientists detect rare, deep-Earth tremor

Japan scientists detect rare, deep-Earth tremor: Scientists who study earthquakes in Japan said Thursday they have detected a rare deep-Earth tremor for the first time and traced its location to a distant and powerful storm.


The findings, published in the US journal Science, could help experts learn more about the Earth's inner structure and improve detection of earthquakes and oceanic storms.

jueves, 25 de agosto de 2016

No más carbón


Chile celebra el Día Internacional de los Parques Nacionales

Nuestro país cuenta con uno de los buenos sistemas de conservación de su biodiversidad a nivel mundial. Fuente: Conaf.cl, 24 de agosto, 2016.


Fuente: www.terram.cl 

Chile cuenta con uno de los mejores sistemas estatales de conservación a nivel latinoamericano y mundial, con 36 parques nacionales, 49 reservas nacionales y 16 monumentos naturales, administrados por la Corporación Nacional Forestal (CONAF) y que abarcan una superficie de 14,7 millones de hectáreas, el 19,3% del territorio nacional, resguardando de manera efectiva los ecosistemas del país y así mantener los procesos evolutivos que permiten conservar la diversidad biológica.

Así lo destacó el director ejecutivo de CONAF, Aarón Cavieres, en el marco de los festejos del Día Internacional de los Parques Naturales o Nacionales, que se celebra este miércoles 24 de agosto, fecha en que a nivel nacional la Corporación realizará en regiones diferentes actividades para que en conjunto con la comunidad se releve el valor de estas unidades que conservan y preservan el patrimonio natural y cultural del país.

Los parques son áreas generalmente extensas, donde existen diversos ambientes únicos o representativos de la diversidad biológica natural del país, no alterada significativamente por la acción humana, capaces de autoperpetuarse y en que las especies de flora y fauna o las formaciones geológicas, son de especial interés educativo, científico o recreativo.

El objetivo básico de todo Parque Nacional es asegurar la conservación de sus valores naturales. Estas unidades representan una figura de protección que lleva aparejado un régimen jurídico especial al objeto de asegurar esa conservación.
Según Cavieres, los Parques Nacionales son espacios singulares, escasos donde lo que prima es la “no intervención” y en los que el principio es permitir el libre devenir de los procesos naturales. Asimismo, estas unidades compatibilizan la conservación con el uso y disfrute por parte los ciudadanos de los valores naturales al tiempo que están al servicio de la investigación y el aumento del conocimiento científico.

De igual modo, agrega, pueden convertirse en un motor para el desarrollo económico de las comunidades aledañas en las que se sitúan ofreciendo una oferta alternativa de uso diferente y coherente con un modelo de calidad de vida que apuesta cada vez más por la conservación de la naturaleza.

El Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE) tiene como objetivo fundamental asegurar la diversidad biológica (artículo 34° de la Ley 19.300 de 1994), cuyo alcance se mide en función del nivel de ecosistemas naturales que son representados. En la actualidad, para el SNASPE se utiliza el Sistema de Pisos Vegetacionales (Luebert y Pliscoff, 2006), el que estableció para el país 127 pisos.

De los 127 pisos vegetacionales o ecosistemas del país, 106 de ellos (82,7%) se encuentran presentes en el SNASPE, en distintos grados de cobertura. Sin embargo, el desafío de Chile para lograr un mejor nivel de conservación de su biodiversidad es integrar al sistema de protección los 21 de ellos (17,3%) que no se encuentran bajo protección.

“Nuestro objetivo, como Gobierno, es seguir mejorando la cobertura del sistema, por lo cual estamos trabajando en la creación de nuevos parques nacionales y, como es sabido, recientemente se logró que la Reserva Nacional Río Clarillo, gracias al trabajo realizado por CONAF, se transforme en el primer parque nacional de la Región Metropolitana”, resaltó Cavieres.

DATOS Y CIFRAS
De las 101 unidades que posee el sistema chileno, la más pequeña de ellas es el Monumento Natural Isla Cachagua, con 4,5 hectáreas, donde se protegen especies de aves marinas, especialmente pingüino de Humboldt y Magallánico. La más grande es el Parque Nacional Bernardo O´Higgins, con 3.525.901 hectáreas, que protege varios pisos vegetacionales, como el coihue de Magallanes y ciprés de las Guaitecas, y fauna como el huemul y el lobo marino de dos pelos.


Una de las tantas acciones relevantes que desarrolla CONAF en estas unidades corresponde a los planes de conservación de flora y fauna en algún grado de vulnerabilidad y peligro, resaltando, por ejemplo, los de: huemul, cisne de cuello negro, loro tricahue, flamencos, guanaco, vicuña, flora endémica del Archipiélago de Juan Fernández, pitao, belloto del sur y toromiro.

Cabe destacar que el total de visitantes a las áreas protegidas del país durante el año 2015 fue de 2.689.190 personas, con un 76% de chilenos y un 24% extranjeros. La unidad que concentra el mayor nivel de visitación es el Parque Nacional Vicente Pérez Rosales, que el año pasado recibió un total de 468.523 personas.

También es importante destacar que en noviembre próximo, en la ciudad de Temuco, junto a la Universidad Católica de Temuco, se efectuará el 1.er Congreso Nacional del Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado (SNASPE), con el objetivo de seguir fortaleciendo el sistema e integrar cada vez más a la comunidad académica, científica y a la ciudadanía en esta labor de conservación del patrimonio natural y cultural del país.


Ministerio del Medio Ambiente oficializa la creación de Parque Marino Nazca Desventuradas

Ministerio del Medio Ambiente oficializa la creación de Parque Marino Nazca Desventuradas

jueves, 18 de agosto de 2016

Chile presenta propuestas ante Unesco para proteger la Reserva de Biosfera Cabo de Hornos

En 2016 se inició la segunda década de la Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos, lo que obliga a Chile a entregar un nuevo informe a la UNESCO. Un equipo multidisciplinario e inter institucional trabaja en el desarrollo de un modelo de progreso, que respete la riqueza cultural y proteja la biodiversidad sin mermar el crecimiento económico de la población.




La Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos, la más austral del orbe, comenzó su gestión el año 2005. Su primer decenio trajo resultados en el posicionamiento internacional gracias al nombre Cabo de Hornos, con el que se conoce a esta zona desde 2001. El descubrimiento de la gran cantidad de briófita presente, lo que transformó a este lugar en un hotspot mundial en la temática ya que tiene el 5% de todas las especies a nivel mundial. El aumento de la presencia de la UMAG en la zona, lo que trajo consigo un reforzamiento académico que ha dado sus frutos con alumnos victoriosos en ferias regionales y nacionales de ciencia. En la actualidad, el Estado de Chile debe presentar el plan de gestión que compromete acciones para la segunda década (2016-2025), motivo de la reunión de esta jornada.

¿Qué es una Reserva de Biosfera?
La UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) en su Programa sobre el Hombre y la Biosfera (MaB) crea la distinción denominada Reserva de la Biosfera para definir aquellos territorios que representan la biodiversidad de hábitats presentes en el planeta. A diferencia de otras zonas protegidas en el mundo, la de Cabo de Hornos incluye áreas marinas y personas que realizan actividades económicas para el desarrollo del territorio en general.

La exigencia de Unesco es rigurosa, tanto para la aceptación como con la permanencia de las Reservas de la Biosfera que están conectadas en una red colaborativa a nivel mundial. Actualmente, existen 669 en 120 países, las que deben presentar planes y resultados de trabajo a este organismo, cada 10 años. Cada Estado asume el compromiso de cumplir estas planificaciones que, en caso de no realizarse, son sancionadas con la destitución. Esto le ha ocurrido a 18 Reservas de la Biosfera desde 1971.

Estos antecedentes hablan de un compromiso que debe ser respaldado con trabajo y resultados. Los ejes establecidos en las bases de Unesco, que son tres: la conservación de los ecosistemas, el desarrollo económico y humano sustentable y la implementación de ejemplos de educación y capacitación en cuestiones locales, regionales, nacionales y mundiales de desarrollo sostenible.

¿Cuál es el compromiso de Chile ante Unesco?

Para cumplir con las exigencias de Unesco, las nuevas propuestas son:

1.Centro Subantártico Cabo de Hornos: Se encuentra en período de aprobación por parte del Gobierno Regional de Magallanes, un edificio que dotará a Puerto Williams de la infraestructura necesaria para recepcionar a turistas y contextualizarlos con la Reserva de la Biosfera, desarrollar investigación científica de primer nivel internacional y montar un Centro de Formación Técnica (CFT) el cual expande la cobertura de educación superior dentro de la región.
En este centro se plasma el trabajo colaborativo de UMAG, IEB, Fundación Omora, UNT, Ministerio del Medio Ambiente, de Bienes Nacionales, la Armada de Chile, la subsecretaría de Turismo, Conaf y ahora una nueva alianza con Reino Unido, específicamente con la Universidad de Bangor, que se destaca por su trabajo en conservación y turismo sostenible.

Con este Centro Subantártico se pretende empoderar a la comunidad local de la gestión de su territorio. Es por esto que el CFT tendrá materias de capacitación en gastronomía regional, áreas protegidas y turismo científico, temáticas que potencian la riqueza biocultural de esta ecoregión subantártica.

El intendente de la región de Magallanes y Antártica Chilena, Jorge Flies recalcó la importancia que tiene el Centro Subantártico Cabo de Hornos: “hemos definido ser una región de ciencia, tecnología e innovación y aquí el Centro Subantártico viene a ser fundamental para potenciar uno de nuestros territorios más prístinos, el más austral del continente americano y del mundo. Es un faro al sur del mundo para la ciencia, la educación y una oportunidad para uno de los desarrollos complementarios de la ciencia que es el turismo”. Además reafirmó el apoyo del Gobierno Regional al proyecto: “cuenta con todo nuestro respaldo en lo que hoy está siendo el diseño y lo que va a ser la posterior ejecución”.

2.Ciencia para Chile y el mundo: La Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos es la única en el país que incluye zonas terrestres y marítimas. En coherencia con esta característica, es que se propone ampliar zona de reserva en ambas zonas. El objetivo es incluir a las islas Diego Ramírez dentro de estos terrenos protegidos.

Esta idea trae consigo un desafío logístico importante que se pretende abordar de la mano de la institucionalidad vigente apoyándose en el trabajo y tecnologías de la armada y en los planes de trabajo del Ministerio del Medio Ambiente.

Esta expansión vendría acompañada de la instalación de dos Sitios de Estudios Socioecológicos a Largo Plazo en Diego Ramírez e Isla Hornos, los que complementarían la data del Parque Omora, la cual también sería reforzada.

La importancia de la instalación de estos sitios radica en que permiten estudiar los potenciales efectos del cambio socio-ambiental global de los distintos ecosistemas del país. Esto se vuelve aún más eficaz cuando estas investigaciones se pueden compartir y estudiar en la red mundial de Reservas de Biosfera, ya que los nuevos sitios propuestos son únicos en el mundo por su condición latitudinal incomparable en el hemisferio norte.

La senadora por la región de Magallanes y Antártica Chilena, Carolina Goic, valoró que el proceso de segundo decenio de Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos lograra unir a distintas voces en una idea conjunta de desarrollo sostenible: “Hay que destacar que en torno de un territorio, se unen las voluntades públicas y privadas. En un país que es muy centralista, a veces las cosas se dan al revés, donde los territorios se deben acomodar a las políticas centrales. Lo que se ha estado haciendo (con la propuesta) es tensionar, en el buen sentido, exigiéndonos a todos, académicos, ejecutivo, privados y la comunidad, a unirnos en función de un objetivo común que es la Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos”.

El pasado 2015 se cumplió 10 años desde que las 5 millones de hectáreas ubicadas al sur del canal Beagle – comprendidas entre los fiordos del sur de Tierra del Fuego y el archipiélago Cabo de Hornos – fueran declaradas Reserva Mundial de la Biosfera. Una década ha pasado desde que toda la información entregada por los investigadores que apoyaron al Estado Chileno ante el organismo internacional, convenciera a los expertos de la necesidad de proteger los ecosistemas marinos y terrestres del extremo sur de América.

El logro es atribuible, principalmente, a las autoridades de la época y a los científicos que dan vida al Programa de Conservación Biocultural Subantártica. Dicha iniciativa, llevada a cabo por la Fundación Omora y las Universidades de Magallanes (UMAG), de North Texas (UNT) y de Chile a través de su Instituto de Ecología y Biodiversidad (IEB), lleva más de 15 años haciendo investigación, educación y conservación en dicha zona, y todo ese bagaje le da el mérito para presidir la mesa de trabajo que esta semana se formó con distintos actores estatales, para generar el Plan de Gestión del segundo decenio de la Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos (2016-2025) que se inicia este año, y que será presentado a Unesco a fines de 2016.

Los científicos Ricardo Rozzi – director del Programa de Conservación – y el destacado asesor internacional de políticas públicas turísticas y ambientales Shaun Russell, se sentaron junto a la senadora magallánica, Carolina Goic, el Intendente de Magallanes y Antártica Chilena, Jorge Flies, al seremi de Bienes Nacionales de la región de Magallanes, Víctor Igor, al rector de la UMAG, Juan Oyarzo, rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, e integrantes del Ministerio del Medio Ambiente, de las Fuerzas Armadas y de Turismo para alinear a las instituciones que representan en un proyecto que sirva como modelo de desarrollo sostenible, a nivel nacional e internacional.

¿Qué pasa con el turismo?
 Debido a toda esta propuesta, Cabo de Hornos se transforma en un polo de atracción turística que prestará altos estándares a sus visitantes. Actualmente los cruceros recorren los terrenos marinos de la reserva, lo que se puede complementar con visitas al Centro Subantártico Cabo de Hornos o a diversos circuitos que, en un futuro próximo serán realizados por los mismos profesionales del nuevo CFT ubicado en Puerto Williams.


Tras la reunión queda conformado el grupo de trabajo y los nuevos compromisos que trae la segunda década de la Reserva de la Biosfera Cabo de Hornos, que busca ser un ejemplo de desarrollo sostenible a nivel nacional e internacional con acciones replicables en distintas regiones.